Festivales de música accesibles para todas las personas

Los festivales de música han iniciado su temporada veraniega. Los carteles de las actuaciones ponen fecha y los recintos de toda la geografía se preparan para recibir a artistas y público deseosos de disfrutar de las actuaciones, la música, los espectáculos audiovisuales que acompañan a las actuaciones y las ofertas de ocio y restauración disponibles en muchos de los espacios.

Ahora imagina que vas a acudir a uno de esos festivales y eres una persona con discapacidad auditiva o visual, o que necesitas una silla de ruedas para moverte. ¿Están los festivales de música preparados para ser accesibles a todas las personas? La Fundación Music For All trabaja desde 2019 con el objetivo tanto de hacerlos accesibles a personas con capacidades diversas como de implicar a estas personas en la organización y diseño de los festivales. Su lema “Música de todos y para todos” nos recuerda que la música y el arte no sólo debe ser accesible para todas las personas, sino que también es necesario crear espacios que posibiliten la participación de personas con capacidades diversas en la construcción y creación de la música y la cultura.

“Desde la Fundación Music For All trabajamos para asegurar la accesibilidad a los festivales musicales y para promover e incentivar la potencialidad creativa de las personas con discapacidad o diversidad funcional”. Pablo Galindo. Patrono fundador de Music For All.

Foto: Music For All

Foto: Music For All

Cómo se prepara un festival de música inclusivo

La Fundación Music For All lleva varios años trabajando de manera muy estrecha con el festival almeriense Cooltural Fest. Un trabajo que ha servido de base para dar forma a la Guía de Accesibilidad e Inclusión en Festivales de Música que han publicado con información, orientaciones, normativas y recomendaciones de buenas prácticas que garanticen un propuesta de ocio musical accesible, diversa e inclusiva.

Un material disponible en su página web que, partiendo del conocimiento de las necesidades de diferentes colectivos de personas con discapacidad y diversidad funcional, pretende facilitar que la industria musical sea más inclusiva.

Adecuar el espacio

Diseñar un festival accesible pasa por ponerse en el lugar de otros para ver dónde están las barreras y las necesidades específicas de personas con diferentes condiciones. Sólo de esa manera es posible ver la necesidad de poner en marcha medidas que garanticen la accesibilidad como adecuar las entradas y los aparcamientos, habilitar aseos específicos, adaptar los servicios de restauración que pueda haber en el recinto, preparar y ubicar adecuadamente una señalética con pictogramas correctamente iluminada, establecer zonas preferentes para presenciar las actuaciones o instalar paneles digitales de información.

Como señala Pablo Galindo de la Fundación Music For All, es importante ese matiz en el término preferente. Un espacio completamente accesible no necesitaría establecer estos espacios especialmente reservados para personas con capacidades diversas, pero ahora mismo siguen siendo necesarios. “Tan importante es que la organización de los festivales planifique un espacio accesible como hacer campañas de concienciación para que las personas que asisten respeten los espacios preferentes”, insiste Pablo.

Formación del personal que trabaja en los festivales

¿Cómo atender en el acceso del recinto a una persona con síndrome de Asperger? ¿Cómo orientar a una persona con discapacidad visual o auditiva que acude a uno de los conciertos? Un festival adaptado necesita también formar al personal que trabaja en los diferentes espacios para saber cómo ayudar a las personas con discapacidad sensorial, física, intelectual o con trastornos del desarrollo. Conocer qué indicaciones o materiales de apoyo puede necesitar una persona, mantener un trato respetuoso y entre iguales, saber cómo colocarse para adecuar la comunicación con personas que presentan una discapacidad sensorial y contar con personal de apoyo que conozca la lengua de signos posibilita una mejor experiencia a las personas que asisten. Desde la Fundación Music For All insisten además en la importancia de reflejar la diversidad también entre el personal, algo que empiezan a implementar algunos festivales como el Cooltural Fest que ya en 2019 contó con 30 personas con diversidad funcional entre su equipo de trabajo.

Adaptar e interpretar las actuaciones de cada artista

Cuando acudimos a un concierto no sólo disfrutamos de la música y de la letra de las canciones. Hay todo un entorno que acompaña y enriquece la experiencia. Cómo es el escenario, dónde se sitúan los músicos, cuáles son sus movimientos y expresiones, cómo se mueven e interaccionan, de qué manera van vestidos, qué muestran las proyecciones audiovisuales que acompañan cada actuación o cuándo se intensifica el volumen o el ritmo de una de las canciones.

Las personas con discapacidad visual o auditiva pueden tener acceso a toda esa información, pero necesitan de apoyos para lograrlo. Tener a una persona que interprete las canciones con lengua de signos o disponer de audio descripción para seguir lo que sucede en el escenario es algo a lo que pudieron acceder varias personas con discapacidad sensorial que asistieron el pasado mes de junio al concierto de Amaral en el Cooltural Fest de Almería. La experiencia resultó muy satisfactoria tanto para quienes disfrutaron desde las gradas del público como para los artistas. “Es muy bonito saber que nuestras canciones pueden llegar a todas las personas gracias a los intérpretes y al uso de nuevas herramientas”, decía Eva Amaral al final del concierto.

“Ver en primera fila a personas que están disfrutando del concierto, incluso sin ver o escuchar, es una sensación maravillosa que nos demuestra el enorme poder de la música y que nos iguala a todos”. Eva Amaral. Artista

Hacer posible esta experiencia de accesibilidad requiere un tiempo de preparación por parte de los artistas y las personas que van a desarrollar la interpretación en lengua de signos y las audioguías. “Para poder preparar cada concierto necesitamos al menos un mes”, explica una de las intérpretes de lengua de signos que ha participado en el Cooltural Fest. Lo primero que hace la persona que va a interpretar un concierto es buscar información sobre el grupo: quiénes son, cómo es su música y cómo son los espectáculos en directo. Necesitan que el artista o grupo que va a ser interpretado envíe con antelación el listado y orden de las canciones que compondrán el concierto, así como información detallada del espectáculo (vestuario, proyecciones audiovisuales o escenografía).

La lengua de signos no se interpreta de manera literal por lo que es necesaria una buena investigación de qué quiere decir la letra para preparar bien la interpretación y transmitir el mensaje de la canción. Saber cuáles son los significados de las metáforas y de las letras es básico para poder hacérselo llegar correctamente al público. “A veces hay dudas y necesitamos un tiempo de consulta con los artistas para poder aclararlas y avanzar en el proceso de interpretación”, explica una de las intérpretes del festival.

Materiales de apoyo para la accesibilidad

La motivación principal cuando se acude a un festival de música es disfrutar del concierto. Hacer esta experiencia accesible para personas con discapacidad sensorial es posible a través del uso de recursos que disponen de la tecnología adecuada como las mochilas vibradoras, el bucle magnético que mejora la experiencia auditiva de personas con audífono e implante coclear o el sistema de subtitulado en directo a través de pantallas LED.

Las mochilas vibradoras, uno de los recursos que este verano están disponibles en festivales como el Cooltural Fest, el Sonorama, o el Festival de Teatro de Mérida, son dispositivos que registran las frecuencias del sonido y las reproducen en forma de vibraciones. Las personas con discapacidad auditiva pueden colocarse estos dispositivos en el pecho o la espalda y sentir la música a través de las vibraciones, consiguiendo una experiencia mucho más inmersiva.

Según los datos del INE en España hay 3,1 millones de personas con algún tipo de discapacidad. Desde la Fundación Music For All trabajan con el objetivo de mejorar el acceso a la cultura musical de todas estas personas. Para que, quien quiera, pueda participar y vivir una experiencia lo más plena posible. Como defienden desde la Fundación, “cualquier acto humano es susceptible de transformase en Cultura y todos los seres humanos tienen derecho a que sus capacidades y dotaciones diversas sean estimuladas y desarrolladas”.

Adaptar y facilitar el acceso a la cultura de todas las personas es también una manera de cuidar y de fomentar una sociedad más inclusiva que visibiliza el valor de los cuidados.

“He aprendido mucho de las personas que he cuidado: preparación, conocimientos y, sobre todo, agradecimiento”.